Por: Héctor J. Maymí-Sugrañes, Ph.D
Director General
Catedrático-Investigador
para la Nueva Cultura Económica
Instituto de Estudios para la Creatividad
y Desarrollo (INCIDES)
Consejo de Desarrollo de Tijuana (CDT)
Para nosotros, desde el Instituto de Estudios para la Creatividad, Innovación y Desarrollo (INCIDES), establecimos como un neologismo el concepto de Nueva Cultura Económica. Ya que términos como Nueva Economía, Economía Naranja, Economía Basada en el Conocimiento, Economía Digital, Economía Creativa, entre otros, nos parecen que representan segmentos de un ecosistema más grande que hay que explicar. Al intentarlo explicar, nos surge la necesidad de crear uno nuevo, para que puedan ser incluidos aspectos y actores estratégicos que son fundamentales de este ecosistema que se está creando frente a nosotros.
Así, definimos la Nueva Cultura Económica como un ecosistema de colaboración de diferentes actores estratégicos y otros aspectos, que están relacionados con la economía creativa, digital y aquella basada en el conocimiento. Para nosotros lo que une a este ecosistema de colaboración es la innovación en sus diferentes variantes. Desde la innovación científica, digital, tecnológica, creativa, entre otras. Lo anterior establece un tipo de ecosistema donde existen diferentes formas de relaciones de colaboración.
El tipo de colaboración y quienes colaboran, como la manera que entre ellos se relacionan, es lo que une a la Nueva Cultura Económica y la democracia. Para nosotros desde el INCIDES, las formas de colaboración entre los diferentes actores estratégicos se tiene que dar desde los contextos de libertad de mercado, comercio y empresarial. Es vital para la innovación que se de en libertad, que la misma se tiene que establecer en un sistema democrático tanto de gobierno, como socioeconómico y cultural, donde todos los actores y sectores estratégicos participen con equidad.
La clave de esa relación entre Nueva Cultura Económica y la democracia, entre muchas de sus aristas, se puede analizar desde la perspectiva de la innovación social. Podemos entender la innovación como la búsqueda nuevas formas de resolver problemas y retos sociales existentes o que se prevén. La innovación social, no es solo la apropiación de tecnologías digitales por parte de los diferentes sectores sociales y comunidades. Puede ser eso, pero es mucho más. Es proponer aspectos de cambio, que al analizar y proponer sean nuevas maneras de enfrentar los retos que existen o por venir des una manera diferente utilizando tecnologías digitales, investigación y desarrollo, creatividad entre otros, como parte de ecosistemas de colaboración horizontal donde los diferentes actores estratégicos y sociales participen. Puede ser maneras de utilizar recursos físicos como humanos de forma diferentes, a través de innovaciones efectivas y eficientes.
Pero es aquí donde la Nueva Cultura Económica y la democracia se relacionan dentro de la innovación social. Para que la innovación social sea efectiva y eficiente, tiene que darse desde la perspectiva de apertura e inclusión de los diversos actores estratégicos y sociales. No solamente a participar, sino a ser parte de las discusiones para la conceptualización, diseño e implementación de la innovación social.
Lo anterior solamente puede abrir las oportunidades a todos, si se da como parte de una estructura de gobernanza en los lugares que se desarrolle la innovación social, en la cual sea democráticamente deliberativa y participativa. En las familias y comunidades se vayan estableciendo formas de gobernanza que fomenten la innovación y creatividad para enfrentar los problemas y retos actuales como futuros. Tiene que ser formas de gobernanza, en los cuales la equidad de género, edad, étnica y procedencia socioeconómico no limite las oportunidades de los actores estratégicos y sociales.
Nuestro reto en ir comprendiendo como la innovación social se está dando en nuestras comunidades y familias, centros de estudio y trabajo. Saber las formas de organización y gobernanza que van surgiendo. Comprender la efectividad y eficiencias de las mismas. Ya que esas experiencias podremos ir comprendiendo el ecosistema de colaboración y las maneras de gobernanza democrática que necesita.
